domingo, 28 de octubre de 2012

Tyler vs Lance Armstrong




Hamilton – The Secret Race
Hay un antes y un después de leer este libro. A mi me ha dejado una fuerte impresión, y si bien hay muchas datos que ya son más que conocidos, impacta leerlo en su conjunto.
Es un libro escrito por Tyler Hamilton, que fue uno de los principales gregarios de los primeros años ‘Tour’ de Lance Armstrong en US Postal, y posteriormente como líder en los equipos CSC y Phonak. Fue 2º en el Giro de 2002, ganó el clásico más duro Lieja-Bastoña-Lieja, fue 4º en el Tour de 2003 con un solo de más de 100kms y… fue pillado por contener sangre de otra persona en su cuerpo en la Vuelta 2004.
Es un hombre con una capacidad de sufrir extraordinaria, siendo capaz p.e. de llegar 4º en el Tour del 2003 tras una doble fractura de clavícula en la primera etapa !! (tuvo que esmaltar de nuevo 11 dientes tras rechinarlos durante etapas para evitar el dolor de la clavícula).
Es un libro muy ameno (en 8 días he leído 2x las 300 páginas), y lejos de ser un documental, relata sus vivencias en el mundo del ciclismo profesional, sobre todo una detallada descripción de sus métodos de dopaje y el dopaje en general, pero escrito en primera persona lo que deja sentirnos en su propia piel.
Empieza a explicarnos como los grandes ciclistas americanos fueron completamente pulverizados cada vez que llegaban a Europa a disputar las carreras de 3 semanas. Había una velocidad descomunal, que aumentaba y aumentaba a la medida que pasaban los días, con cosas tan absurdas que 1 solo tío podía aguantar durante horas y horas un pelotón entero cazándolo.  Ciclistas pesados que no tenían ningún problema en subir puertos con una velocidad enorme, y además, corredores que no tenían ningún día malo, ni picos ni valles. Not normal!.
Vio a Riis en el 1996 y decenas de Riises más y no sabía que estaba pasando. Americanos realmente fuertes que corrían muchísimo (como el Armstrong) pasaban años sin poder terminar el Tour o llegar en posiciones muy mediocres.  Andy Hampsten tenía los mismos valores de fuerza que anteriores años (ganó el giro en ’88) pero apenas pudo llegar entre los mejores 50!!
En el ’97 es cuando Hamilton ve que después de cada etapa los “soigneurs” (asistentes responsables de la comida, masajes, etc.) daban “bolsos blancos” sacados de las neveras. No parecía gran cosa, porque lo hacían de una manera tan rutinaria. Solamente se lo dieron a los corredores fuertes del equipo, los líderes y los que tenían que hacer mayor esfuerzo en la montaña.
Era totalmente imposible ganar contra los de los ‘bolsos blancos’, y tras 1000 días de ver las injusticias ajenas, Tyler también se rindió. Aceptó.

EPO cambió todo.
Andy Hampsten, Scott Mercier y otros que se negaban a pasar por el tubo, no tuvieron más remedio que renunciar al ciclismo.
Se podía competir contra las anfetaminas, contra los anabólicos, pero contra el EPO no había nada que hacer.
Leyendo el libro te das cuenta que absolutamente NADIE, nadie pudo competir una carrera de 3 semanas sin EPO. La diferencia, la ventaja era simplemente demasiado.
Explica que EPO causa el riñón a producir más glóbulos rojos que transportan el oxígeno, aumenta el hematocrito. Podría aumentar el pico de fuerza en un 15% y la posibilidad de aguantar un contrareloj a un 80% del máximo con un aumento de un 80%!!!

La velocidad media del Tour entre ’80-’90 era de 37,5 km/h, y entre ’95-’05 era de 41,6 km/h. Una diferencia de 22% si cuentas con la resistencia al aire.  ¿Hay dudas del dopaje general?

Por qué fue tan fácil?
Primero porque EPO era en el principio indetectable. Solamente se podía medir el valor del hematocrito, y se decidió dejarlo en el máximo de un 50%. La cuestión llenar el valor (Hamilton era 42) hasta 50 y por tanto ganar un (en su caso) 19%.
Riis en ’96 llegó a 64 cuando hizo su bestialidad en la cronoescalada. (Mr. 60 le llaman)
Los corredores sentían que era justo, porque TODO EL MUNDO –al menos- podía tener las mismas posibilidades. (A Level playing field).
(Importante: No era que un don nadie se hinchaba de EPO, sino que podías entrenar mucho más fuerte, y durante días y días sin que el cuerpo se degeneraba. No era para los holgazanes, sino para los que amaban machacarse diariamente al máximo).
Cuando empezaban a hacer controles fuera de las competiciones, fue tan fácil engañar a los inspectores (que no podían hacer controles entre las 22:00 y las 06:00) simplemente hacer microdosis cada noche a las 22:01 (una hora especialmente ocupado para los ciclistas). Una dosis muy menor pero directamente en la vena para que el día siguiente no pasabas del 50.
Los médicos del equipo llevaban el EPO + unos “huevos rojos” de Andriol (testosterona) cada semanas para recuperar el músculo, y lo inyectaban en el brazo, culo y donde fuera.
Hasta el año 98 cuando el  equipo Festina fue pillado tras unas demostraciones nunca vistas (todo el equipo subiendo los puertos sin sudar) con PFCs, un enorme riesgo para la salud.
Gente iba a la cárcel, y los equipos ya no podían permitirse llevarlo encima, por lo que tenían que buscar EPO etc, en las clínicas de los médicos…. Es ahí donde el libro nos lleva a Dr. Fuentes !!
En el 2002 Hamilton ficha por Riis, y en su primera charla le comenta que tiene que hacer una transfusión de sangre. Indetectable hasta hace muy poco (si es que ahora se puede detectar) y muchísimo más potente. Sr. Fuentes lo hacía en sus oficinas de Madrid o en las islas Canarias.
Para no alargar demasiado, las transfusiones daban aun muchísimo más fuerza, y ahora también Hamilton pudo hacer hazañas como con la clavícula rota aguantar un pelotón durante más de 100 kilómetros y ganar con diferencia en una etapa durísima.
No fue hasta que (probablemente) un ayudante de Fuentes mezcló bolsas de sangre que le pillaron a Hamilton (Jesús Manzano casi murió el año anterior por el mismo motivo) con sangre de otro en su cuerpo.
Y aquí otro punto muy importante:
En el principio del libro describe sus años de juventud, explicando que para su familia lo más importante, sin duda, fue la VERDAD. Ser honestos.
Cuando su padre le preguntó en el año 1998, después del follón de Festina, si él se dopaba, contestó sin pestañar: “Papa, si yo tuviera que tomar esta mierda para competir, me retiraría!!”.
Después de que le pillaron, ¿reconoció que lo había hecho? NO!!
De hecho, hasta el momento NADIE ha reconocido haberse dopado después de ser pillado. Nadie. Siempre han pasado años de negaciones, gastándose enormes cantidad de dinero (en el caso de Hamilton casi un millón de dólares) para ‘demostrar’ que tenían razón…
Es triste, pero todo eso hace que con el tema dopaje NO TE PUEDES FIAR DE NADIE.

No obstante, Hamilton termina el libro (tras perder su mujer, entrar en una grave depresión, tras haber perdido ingentes cantidades de dinero) diciendo que hasta que no era capaz de explicar la verdad, no era capaz de vivir feliz.
The Truth really will set you free.
 

Está más bien cabreado con Armstrong, no porque se dopaba (quien no?), sino por el abuso de poder. En primer lugar llamaba al mismo directeur de la UCI (Hein Verbruggen) cuando alguien tenía ‘más ventaja’ que él, para que le vigilaren, y además por comprar a las instituciones cada vez que él estaba implicado, o por demás intimidaciones.
No deja ninguna duda de que Armstrong se dopaba (para mi sigue siendo el más fuerte de los dopados!), pero también que el tema dopaje, Dr. Fuentes, va mucho más allá que el ciclismo.
 
¿Por qué cuando la Guardia Civil pilló a Fuentes con 185 bolsas de sangre y 39 de plasma identificaron los 58 clientes ciclistas, mientras que otros nombres en clave no fueron identificados?.
Según Wikipedia: La lista de clientes de Fuentes sería más extensa que los nombres en clave ya conocidos que no han sido identificados. Esto se debe a que el juez Serrano, al decidir que sólo se investigaría un presunto delito contra la salud pública (al no ser el dopaje un delito aquí en España), prohibió a los investigadores acceder al contenido de los dos ordenadores incautados en los registros, y que presumiblemente tendrían abundante información y más nombres (en clave o reales) de deportistas de otras disciplinas ajenas al ciclismo, como el fútbol y el tenis. La Guardia Civil tenía vídeos y grabaciones en los que aparecerían deportistas de nivel mundial no ciclistas.

¿Quién puede leer esto sin dar la razón a los Guiñoles Franceses?
No es que los franceses sean santos, pero ¿no es aquí el ESTADO (como la antigua Alemania del Este) que está ocultando información básica para el deporte puro?
Si la Guardia Civil sabe que importantes clubes de la primera (y segunda) división, atletismo, tenis, etc.. están metidos con las transfusiones. Si el ciclismo no tiene “Eurocopa”.. etc, etc.
¿A quién creer que cuando se trata del dopaje? ¿Alberto Contador (A.C.)? ¿Nadal? ¿Barça? ¿Madrid? ¿Marta Dominguez?.... cuesta.

Un libro muy recomendable !!

lunes, 22 de octubre de 2012

Nueva Maratón en Cataluña

Girona - St. Feliu de Guixols

Una nueva maratón en Catalunya:
Tiene buena pinta, más que nada por la zona por lo que discurre: De Girona a St. Feliu de Guixols en 'linea recta' que por lo tanto no permite DNFs :-)

Es el 24 de Febrero, que en si es una mala fecha:
Es el día de la Maratest de 30K en Badalona, y 3 semanas antes de la maratón de BCN.

Lo bonita, vas por los caminos de les Vies Verdes !!

domingo, 21 de octubre de 2012

My First DNF...

Cuando dejas escapar la opción más lógica y saludable, DNS, lo más probable es que acabas consiguiendo el tan merecido DNF... creo que es la primera vez, y tan solo espero que no sirva de precedente...

Como ya comenté en el post anterior, llevo ya dos÷tres semanas con un dolor muy fuerte en el gemelo. No parece que sea una rotura fibrilar, ni algo de los tendones, sino más bien el gemelo se me pone duro como una piedra a la medida que vaya aumentando los kilómetros.

No obstante, cardiovascularmente me siento fenomenal, y tras 6 días de descanso me sentía ayer más fresco que nunca. Sabía que 42 kms no era una buena modulidad para probarme de nuevo, pero al tener la inscripción ya pagada...
Estaba dudando todo el sábado, pero al ver por la tarde la predicción de los posibles 180 litros por m2 no lo dudé más. La vena sadomasoquista me convenció que con estas circunstancias lo de menos era un poco de dolor en el gemelo. A sufrir !!!

Duermo 6 horas largas, sin preocupaciones, 6 rebanadas de pan integral con mermelada, medio litro de Recuperation y me dirijo en coche a Castelldefels. Deliberadamente voy con bambas nuevas, sin geles (incluso se me olvidó comer un plátano) y en coche empieza a llover con ganas.

Pero nada más aparcar, la lluvia desaparece por completo y sin calentar me coloco en mi cajón, que curiosamente era sub 3h (supongo por mi marca de 10K) así que me meto al final donde estaba también el globo 1h35. Bien.

Salimos demasiado rápido a 4'10-4'15 pero ya en el km 2 conseguimos un ritmo constante de 4'27".
El gemelo se me queja pero es bastante soportable. Pasamos el 5K en 22:30 y manteniendo el ritmo pasamos el 10K (parecía algo largo) en 45:30. De momento bien, el cuerpo fresco, y las piernas quejándose...como en cualquier otra maratón. Se quedan en meta los casi 3000 participantes de 10K y seguimos los 2000 de la mitja y unos 330 con la intención de acabar la maratón entera.
Pero sin darme cuenta, de repente pierdo de vista a la liebre 1h35 y veo que mi ritmo ha bajado notablemente, a 4'37". Ya me va bien, que tampoco estoy hoy para hacer 3h10, pero el cuarto parcial de 5 kms es incluso peor. 4'47" !!! Peor que mis entrenos más largos... Algo pasa.
La mitja marató la paso en 1h38:27, y dejando los 2000 que se quedan allí, ya completamente solo inicio la segunda mitad de la maratón.

Pasa un km, otro km, pero no sé que me pasa. Voy ya a un ritmo >5'/km a pesar de no sobrepasar las 120 pulsaciones por minuto (es un decir). No estoy cansado en absoluto, pero mis piernas no avanzan. Me veo incapaz de hacer 20 kms más en este estado. Estiro los gemelos, corro un poco más... y me rindo. Voy trotando hacia atrás unos 300 metros, pero NO. No puede ser. Me giro y nuevamente estoy en la carrera. 300 metros, 500 metros... pero veo que no tiene ningún sentido. Me giro de nuevo y esta vez definitivamente para acabar los últimos 3 kilómetros con los de la mitja, a su ritmo 5'30".

Podría decir que ha sido por el gemelo, pero la verdad es que el dolor de gemelo era del todo aguantable. Simplemente mis piernas no querían correr más (quizás inconscientemente mi gemelo dio señales inequívocos de "retirada" a mi cerebro).
Así he acabado con el mal sabor de no haber tenido ni el disfrute de haberme cansado cardiovascularmente, que de hecho es la sensación más placentera de correr (para mi al menos).

Definitivamente:
Quizás es por falta de fibras lentas, pero no estoy hecho para la maratón!!
Como diría Lance Armstrong,  no estoy hecho para la maratón "Paniagua" ;-)
 

jueves, 18 de octubre de 2012

Libros: The Secret Race & Eat&Run

Scott Jurek, el mejor ULTRARUNNER de todos los tiempos (con permiso de Kilian) y Tyler Hamilton explicando la gran trama de dopaje como 'compañero' de Lance Armstrong)
Ya me han llegado los dos libros que pedí el domingo a Amazon.es.

Me parece que de momento no han salido en Castellano, por lo que he tenido que pedirlos "in English" con la ventaja de evitar algunas traducciones nefastas tipo "Billy 'Cabeza de Chorlito' (en vez de Bonehead en Nacidos para Correr-Born To Run).

Es bien sabido que soy un desastre explicando las cosas, por tanto, no esperéis una gran crítica literaria, pero al menos daré mi opinión una vez leídos los libros.

Según Amazon:
For nearly two decades, Scott Jurek has been a dominant force—and darling—in the grueling and growing sport of ultrarunning. In 1999, as a complete unknown, he took the lead of the Western States Endurance Run, a 100-mile traverse over the old Gold Rush trails of the California Sierra Nevada. He won that race seven years in a row, setting a course record along the way. Twice he won the Badwater Ultramarathon, a 135-mile “jaunt” through Death Valley. Recently he set an American record of 165.7 miles in 24 hours—6 1/2 marathons in one day. And he was one of the elite runners who traveled to Mexico to run with the Tarahumara Indians, as profiled in the bestseller Born to Run. His accomplishments are nothing short of extraordinary, but that he has achieved all of this on a plant-based diet makes his story all the more so.

In Eat and Run, Scott Jurek opens up about his life and career—as an elite athlete and a vegan—and inspires runners at every level. From his Midwestern childhood hunting, fishing, and cooking for his meat-and-potatoes family, to his early beginnings in running (he hated it), to his slow transition to ultrarunning and veganism, to his world-spanning, record-breaking races, Scott’s story shows the power of an iron will and blows apart all the stereotypes of what athletes should eat to fuel optimal performance. Chock-full of incredible, on-the-brink stories of endurance and competition, fascinating science, and accessible practical advice—including his own favorite plant-based recipes—Eat and Run will motivate everyone to “go the distance,” whether that means getting out for that first run, expanding your food horizons, or simply exploring the limits of your own potential.



Y también según Amazon:
On a fateful night in 2009, Tyler Hamilton and Daniel Coyle met for dinner in Boulder, Colorado. The two had met five years before while Coyle was writing his bestselling book, Lance Armstrong: Tour de Force. But this time, Tyler had something else on his mind. He finally wanted to come clean, about everything: the doping, the lying, his years as Lance Armstrong's teammate on U.S. Postal, his decade spent running from the truth. 'I'm sorry,' he told Coyle. 'It just feels so good to be able to talk about this. I've been quiet for so many years.'

Over the next eighteen months, Hamilton would tell his story, and his sport's story, in explosive detail, never sparing himself in the process. In a way, he became as obsessed with telling the truth as he had been with winning the Tour de France just a few years before. The truth would set Tyler free, but would also be the most damning indictment yet of Tour winners such as Armstrong.

The result of this determination is The Secret Race, a book that pulls back the curtain and takes us into the secret world of professional cycling like never before. A world populated by unbelievably driven - and some flawed - characters. A world where the competition used every means to get an edge, and the options were stark. A world where it often felt like there was no choice.

domingo, 14 de octubre de 2012

Números mágicos



37 - 1:22 - 2:58.
Para mí el número mágico.

Ni 17:14 (que también encajaría), ni 90-60-90 (que tampoco me da asco...)  sino el 37 - 1:22 - 2:58 es mi número mágico y que además lo veo por todos los sitios, y que me llena de fe y desilusión a la vez.

Fe por haber conseguido en varias ocasiones el primer elemento de la trilogía, pero desilusión por lo lejos que parece el último.

Tras una semana fantástica, de aquellas en que tienes que hacer un esfuerzo para parar las piernas al ir solas, me ha tocada una semana horribilis.
Hace un par de semanas XeviX hizo este afortunado comentario:
Supongo que cuando un corredor roza su mejor forma física, al mismo tiempo existe el peligro de caer al otro lado, por sobreentrenamiento, anemías, lesiones, etc.
Pues, parece que el momento de forma fue eso...un leve momento para después caer en picado.
Como si el breve momento fuera una burbuja que irremediablemente se tenía que pinchar.

Y me hace pensar que realmente no todos estamos hechos para la maratón. No todos tenemos la capacidad física para correr ultras, ni por mucho que uno se empeña que sí se puede conseguir todo a base de entrenos.. Mi débil cuerpo de mediofondista, conectado a una mente que se vuelve loco leyendo las hazañas de Scott Jurek, Kilian, (Piernas, Pau..) y demás bestias de las ultradistancias, está eternamente castigándose en el intento de ser un gran maratoniano...cosa que parece que no va a ser posible.

Viendo las numerosas firmas de los Corredors.cat, y viendo siempre el mismo número, 37-1:22-2:58 (que ya es casualidad) me hace pensar que 37-1:24-3:17 no cuadra demasiado.

Y es que todo salió perfecto esta vez:
Desde la 1a semana de agosto una media de 55 kilómetros a la semanas, repartidos entre 3 sesiones,
y las últimas semanas incluso 2 tiradas largas de 30 kms y una mitja con MMP.

Pero fue ir al fisio el martes día 2 (y cuesta explicar a una esposa que la tortura del fisio nada tiene que ver con el placer de un masaje..) y desde entonces estoy fatal:
Quizás porque me mente me obligo a hacer 3 sesiones, y a hacer la última de 30 kms, pero fueron 3 entrenos lamentables.
El miércoles 3 10k en 51:33 (no recuerdo un entreno igual de lento), el viernes 17 17k a 4'41, sin disfrutar ni un km, y el domingo cumpliendo mi "obligación" de 30k, pero sin disfrutar más que los 4 kilómetros centrales por el río llegando a Martorell, al final en 4'55"/km.

Y fue una semana muy, muy buena comparada con la presente. El martes tras 9,3 kms mis piernas no querían ni podían más y me obligaban a volver caminando -dolor agudo en el gemelo izquierdo- y tras 5 días de descanso (además de gastroenteritis...que al final todo está ligado) hoy 10 kilómetros horribles con lo mismos dolores en el gemelo.

Es por tanto bastante probable que NO corra la Marató del Mediterrani la semana que viene, y tengo que hacer un pensamiento serio para volver a la pista, e intentar hacer cursas cortas (5K-10K) y de ninguna manera sobrepasar la mitja marató.

Evidentemente, no ayuda comprar este tipo de lectura en Amazon.es....