Pues sí, este domingo por fin se celebró the Gold Label Marathon de València.
(Digo por fin, porque las semanas previas a la mítica distancia siempre son una incordia a la vida "normal". Que si me constipa, que si me siente mal la comida, que si me lesiono. Hasta te lo piensas antes de dar un beso a tu hijo por tener unas décimas de fiebre...)
Bien! Si queréis toda la información sobre esta maratón, tenéis el excelente BlogMaldito.
El sábado, después de comer tres cuartos de kilo de Couscous en casa, nos vamos 5 Correcats -Jorfer, que hará su maratón nº 50, ManoloM, Fran, Jaume y yo- en un coche a Valencia.
Tras unas 3 horas de viaje, llegamos sobre las 18:30 de la tarde a la feria de Valencia, en el impresionante recinto de la ciutat dels arts i les ciències.
Llegamos bastante tarde, pero está a tope de gente, y se respira un ambiente realmente bueno.
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| Foto de Aurelian |
Tras una noche de poco dormir (metido en la cama desde las 0:00 hasta las 06:00, pero no es lo mismo dormir al lado de tu mujer que con otro hombre, con ronquidos... total, que a las 03:00 me desperté y no pude conciliar más el sueño), me ducho a las 06:15 y cuando bajo veo que el gran Pablo Villalobos estaba en nuestra mesa desayunando. Él venía a hacer de liebre a Marta Esteban, y pocas horas después la llevaría a hacer un marcón , 2h30, Novena atleta española en maratón all-time
y probablemente con un ticket para el mundial!!
La idea era salir a las 07:30 del hotel, a unos 1500 metros caminando de la salida, pero los problemas de tripas de gran parte de la expedición hacía que no pudimos salir hasta 20 minutos más tarde... cosas de la maratón!!
Al llegar a la zona de la salida, sobre las 08:15 había tanta gente por allí, y unas colas enormes para ir al lavabo (no creo que les haya dado tiempo a todos).
Tantísima gente que ni siquiera veíamos los cajones de salida. Un momento de pánico (siempre temo llegar tarde), de nervios, pero a las 08:20 por fin pude entrar en mi cajón sub 3h. Bien!!
19.000 corredores de la Maratón + 8.000 corredores de la cursa de 10K estábamos espectantes, en carriles paralelos (aunque separados, no compartíamos ningún tramo juntos), esperando el disparo de salida. Me esperaba un Highway to Hell, o Eye of the Tiger y confetis etc... pero la salida fue más bien sosa.
Y salimos!! En menos de un minuto cruzo la línea de salida, y buscamos la línea dorada que nos acompañaría durante 42195 metros por Valencia.
Salgo a ritmo, mi idea era hacer parciales de 22', pero ya veo tras dos kilómetros que no voy del todo cómodo. No pasa nada, que quizás es cuestión de coger el ritmo, y tiro de paciencia para ver si mejoran mis sensaciones. El primer parcial en 21:40, pero voy algo acelerado. Bajo ligeramente el ritmo, pero no acabo de sentirme cómodo. Segundo parcial en 22:02, (43:42).
Totalmente según lo previsto, pero ya me imagino que no acabaré la maratón a este ritmo. Empiezan los primeros pensamientos del plan B: Ritmo 4'30" para hacer un 3h10 que teóricamente tendría que poder hacer sin demasiados problemas.
Así voy unos kilómetros, pero en el km 13 tengo la rara sensación como si mi pierna izquierda fuera un par de centímetros más corta que la derecha. Me noto torcido, inestable, y con las piernas sin energía.. y no llevo ni un tercio de la distancia!.
Pues...toca cambiar las cosas. Me tomo el primer gel, que estaba previsto para el km 19, y parece que está funcionando. De repente me encuentro mucho mejor, y la cojera también ha desaparecido.
El tercer parcial la salvo con 22:24 y el cuarto parcial me siento realmente bien, 22:09.
Un kilómetro más y ya pasamos por la media maratón, con un tiempo más que correcto: 1h33:05.
Tan bien me siento, que incluso estoy soñando en un tiempo sub 3h06, haciendo negative-split. Pero 2 kilómetros más tarde me despierto de este sueño y de repente me noto las piernas sin fuel. Totalmente vacías. Utilizo nuevamente el comodín del gel, pero esta vez no noto para nada el efecto positivo del primer gel... llevo 24 kilómetros y tengo que parar. Venga va! Al menos hasta el km 25!
Me mentalizo de al menos mantener un buen ritmo hasta el km 25 (22:36) pero ya no puedo más.
Y empiezo a caminar...
6 de las primeras 9 maratones no tuve más remedio que caminar, pero las últimas 6 aguantaba hasta la misma línea de meta. Erróneamente pensaba que había dominado (si no el ritmo, sí) la distancia. Quizás había perdido el respeto a la distancia? Sea cual fuera el motivo, no podía correr un paso más.
Y si me hubiera pasado en la maratón de p.e. Empúries, seguro que la caminata había sido muúúy larga. Pero aquí era imposible. Nada más empezar a caminar, el fantástico, y enormemente entregado público valenciano no me dejaba.
"Vengo Dennis, sí que puedes! Trota un poquito! ánimos campeón! Haz 1 kilómetro más, amigo!"
Sin darme cuenta, al tercer paso ya estaba nuevamente corriendo. Un ritmo muy inferior, pero corriendo.
Lamentablemente, esto no significa que estaba mejor. Corría, pero ya ni siquiera podía mantener un ritmo de 5'/km. El sexto parcial de 25:44 aun fue digna, pero después, al km 30, nuevamente tuve que dejar de correr... no podía hacer un paso más... y nuevamente el público me "obligó" a seguir corriendo, con palmaditas en la espalda, empujándome literalmente, y volví a correr tras 10 míseros pasos.
Pero esta vez el ritmo era tan ridículo, que me daba vergüenza de lo lento que iba. Durante 5 kms no había forma de ir más rápido que 5'47"/km. Jamás en mi vida he corrido tan lento. Me adelantaba la liebre sub 3h15, después en el km 34 el grupo de 3 de mis amigos de viaje (que querían hacer 3h19), y no había forma de acelerar el ritmo.
Haciendo cálculos, a este ritmo al menos bajaría de 3h30, pero tenía que seguir corriendo.
Y llegaba el km 35: Quería caminar de nuevo, pero vi 3 niños pequeños con los brazos extendidos, y no pude dejar la ocasión para chocar sus menudas manos. Y fue como si una parte de la energía de estos chavales entrara en mi cuerpo, y sin pretenderlo hacía un sprint de 30 metros con la energía 'robada' de los peques. Duró poco la alegría, y volvía a mi ritmo lento, pero mi cara ya había cambiado. Estaba disfrutando... de poder hacer lo que me gusta, correr, y de ver a tanta gente animando sin nada a cambio.
Choco más manos, y otro sprint de 30÷40 metros, con el júbilo de los voluntarios que me prestaron la energía... y así sigo haciendo el "yoyo" hasta el km 39.
Y por fin me entró la lógica conclusión: ¿Por qué no aprovechar toda esta energía gratuita hasta acabar la maratón? Empezando por los niños, pero viendo que los mayores tampoco se oponían, decidí dejar el brazo derecho en horizontal y durante 3 emotivos kilómetros flotaba por las calles de Valencia y los ánimos del público me llevaron en volandas hasta la meta.
Con los brazos extendidos acabé los últimos 3 kilómetros a un ritmo de 4'12"/km, feliz como si hubiera destrozada la marca!!
El tiempo final ya no importaba (3:21:02): Pura alegría cuando cruzaba la meta con los brazos en alto. Ya vendrá la marca en otra ocasión.
Nos cuelgan la medalla Finisher, una bolsa llena de productos de la tierra, y nos hacemos una foto en la meta.
Una ducha rápida, y todos al restaurante donde una pareja de amigos Correcats valencianos nos esperaban en la mesa...
¿Hay algo mejor que acabar la fiesta con una enorme y gustosa Paella Valenciana entre amigos?
